El consumo medio de combustible de los vehículos nuevos matriculados en España se situó en 4,8 litros por cada cien kilómetros al cierre del pasado ejercicio, lo que supone una disminución del 20% en comparación con las cifras anteriores a la crisis económica (2007) y una rebaja del 4,7% respecto a los datos de 2012. Según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), la cifra de consumo de combustible de los coches nuevos en España en 2013 representa una fuerte bajada respecto a los 6 litros por cada cien kilómetros contabilizados en 2007 y se sitúa por primera vez por debajo de la barrera de los 5 litros por cada cien kilómetros.
Los consumos medios contabilizados en el mercado español durante el pasado ejercicio están por debajo de la media europea, con 4,98 litros por cada cien kilómetros en 2013, con un descenso del 3,8% al compararlo con los datos de 2012. No obstante, la comparación del consumo medio de los automóviles nuevos matriculados en la Unión Europea entre el pasado ejercicio y el inicio de la crisis (2007) muestra una mejora de la eficiencia de los vehículos del 19,9%. Por otro lado, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los coches nuevos vendidos en España cerraron 2013 con una cifra de 122,4 gramos por kilómetro, un 4,8% menos respecto a los datos del año anterior. La media española de emisiones de CO2 de los vehículos nuevos, al igual que el consumo, se sitúa por debajo de la media europea, que cerró el pasado ejercicio con 127 gramos de dióxido de carbono por kilómetro.
Los consumos medios contabilizados en el mercado español durante el pasado ejercicio están por debajo de la media europea, con 4,98 litros por cada cien kilómetros en 2013, con un descenso del 3,8% al compararlo con los datos de 2012. No obstante, la comparación del consumo medio de los automóviles nuevos matriculados en la Unión Europea entre el pasado ejercicio y el inicio de la crisis (2007) muestra una mejora de la eficiencia de los vehículos del 19,9%. Por otro lado, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los coches nuevos vendidos en España cerraron 2013 con una cifra de 122,4 gramos por kilómetro, un 4,8% menos respecto a los datos del año anterior. La media española de emisiones de CO2 de los vehículos nuevos, al igual que el consumo, se sitúa por debajo de la media europea, que cerró el pasado ejercicio con 127 gramos de dióxido de carbono por kilómetro.