Casi 40.500 conductores han sido denunciados por exceso de velocidad en una semana, según los resultados de la campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) para concienciar a los conductores de la necesidad de levantar el pie del acelerador para reducir la siniestralidad en las carreteras. Según la DGT, los resultados de la campaña de control, realizada entre el 18 y el 24 de este mes, demuestran que el cumplimiento de los límites de velocidad sigue siendo “una de las asignaturas pendientes de la seguridad vial” en España.
En los siete días de campaña, los agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado casi 800.000 vehículos, en concreto 791.478, de los cuales 40.447 (el 5,1 por ciento) han sido denunciados por no cumplir los límites de velocidad. De los vehículos controlados, en torno al 60 por ciento (440.416) circulaban por carreteras convencionales (las de un solo carril por sentido), que es donde se producen la mayoría de los accidentes con víctimas. Un total de 23.120 conductores (el 5,2 por ciento) fueron denunciados en estas vías por circular a una velocidad superior a la permitida. Mientras, en autovías y autopistas se han controlado 351.062 vehículos, de los que 17.327 conductores (el 4,9 por ciento) fueron denunciados por rebasar los límites de velocidad.
Circular a una velocidad superior a la permitida está considerado como una infracción grave o muy grave y sancionado con multas de 100 a 600 euros y con la retirada de 2 a 6 puntos del carné en función de la velocidad a la que se circule. Además, los grandes excesos de velocidad son delito, tal como recoge el artículo 379 del Código Penal. Precisamente, durante la campaña cinco conductores han incurrido en un supuesto delito contra la seguridad vial al conducir a una velocidad superior en ochenta kilómetros por hora a la permitida en dicha carretera. Por estos delitos, estos conductores podrían ser condenados a penas de tres a seis meses de prisión o a la de multa de seis a doce meses o a trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, además de a la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a un año y hasta cuatro.
En los siete días de campaña, los agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado casi 800.000 vehículos, en concreto 791.478, de los cuales 40.447 (el 5,1 por ciento) han sido denunciados por no cumplir los límites de velocidad. De los vehículos controlados, en torno al 60 por ciento (440.416) circulaban por carreteras convencionales (las de un solo carril por sentido), que es donde se producen la mayoría de los accidentes con víctimas. Un total de 23.120 conductores (el 5,2 por ciento) fueron denunciados en estas vías por circular a una velocidad superior a la permitida. Mientras, en autovías y autopistas se han controlado 351.062 vehículos, de los que 17.327 conductores (el 4,9 por ciento) fueron denunciados por rebasar los límites de velocidad.
Circular a una velocidad superior a la permitida está considerado como una infracción grave o muy grave y sancionado con multas de 100 a 600 euros y con la retirada de 2 a 6 puntos del carné en función de la velocidad a la que se circule. Además, los grandes excesos de velocidad son delito, tal como recoge el artículo 379 del Código Penal. Precisamente, durante la campaña cinco conductores han incurrido en un supuesto delito contra la seguridad vial al conducir a una velocidad superior en ochenta kilómetros por hora a la permitida en dicha carretera. Por estos delitos, estos conductores podrían ser condenados a penas de tres a seis meses de prisión o a la de multa de seis a doce meses o a trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, además de a la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a un año y hasta cuatro.