El Gobierno estudia implementar un sistema de peaje por satélite de Siemens. Un receptor GPS en el coche controla por dónde circulas y calcula el gasto de los kilómetros recorridos en vías de peaje.
Circulas por una vía de dos carriles por sentido, a una velocidad alta. Reduces la marcha hasta que te paras por completo ante una cabina de peaje. Buscas la tarjeta o el dinero en efectivo y pagas. ¿Cuánto tiempo pierdes? ¿Cuánto combustible de más (ahora que está a precios escandalosos) supone?
Todo esto podría acabarse. Siemens ha desarrollado un sistema de peaje por satélite, que permite entrar y salir de las infraestructuras de pago sin estas molestias. A finales de mes recibirías en casa un extracto con el gasto que has realizado por utilizar esas vías con peaje.
Unidad de abordo de Siemens (OBU)
La unidad de abordo de Siemens (OBU, por sus siglas en ingles) consta de un receptor GPS, un módulo de comunicaciónes dedicadas de corto alcance (DSRC en sus siglas en ingles) que permite mediante infrarrojos interactuar con otros sistemas europeos y telefonía GSM/GPRS que facilita el envío de los datos al centro de control, (que se ecriptan po rseguridad).
El mecanismo envía a los satélites de GPS la localización exacta del usuario, por lo que si el vehículo accede a una de esas vías con peae, queda registrado. Luego se calculará el gasto en función de la distancia recorrida, el número de ejes o la norma euro del vehículo.
Hablamos ahora de este sistema ya que, según El Economista, el Gobierno de España se plantea implementarlo. No sería de extrañar, ya que desde hace bastante tiempo se habla de la implantación de más peajes en España. La Administración tendría un sistema de bajo coste y sencilla implantación, mientras que las adjudicatarias de las autopistas no deberaían construir ni mantener nuevas infraestructuras.
Recordemos que en España hay 15.646 kilómetros de vías de alta capacidad de las que un 21,9 % son de peaje. Mucho menos que otros países europeos. Francia tiene un 40% de autopistas de pago y en Italia alcanza el 80% (así se pagan las autopistas en Europa). Según informa El Economista, el Ministerio de Fomento estaría elaborando los pliegos del concurso para hallar el proveedor para el 2013 de un sistema de control
Este método ya ha sido implementado en ciudades norteamericanas, como Seattle y Washinton. Es el primer sistema que combina, en tiempo real, la posición del vehículo con el cálculo de los peajes en función del tiempo y la distancia. Y Francia empezará a usar esta tecnología de forma escalada, comenzando con los camiones que superen las 3,5 toneladas de peso. Siemens también será el proveedor oficial del sistema de peaje por satélite de Eslovaquia y de la zona de bajas emisiones de Londres (en este caso, controlado por vídeo).
Señalamos aquí tres posibles beneficios y tres posibles hándicaps de este avance. Si se te ocurre alguno más, háznoslo saber en los comentarios.
A favor:
- Comodidad. No hay que pararse ni se necesita llevar dinero en el coche.
- Supone un ahorro considerable en infraestructuras y personal, además de permitir una implantación que no está sujeta a la orografía del terreno o el trazado de las vías. Este ahorro podía ser utilizado para el mantenimiento de vías, hoy por hoy muy deficiente.
- Ese ahorro debería suponer una rebaja considerable en el precio de los peajes de las autopistas, mucho más seguras que, como bien indicó la nueva titular de la DGT, María Segui, contraria a los peajes.
En contra:
- ¿Estamos dispuestos a que el Estado conozca la situación de tu coche en cada momento? El sistema VIA-T que ya existe (el de los peajes de Portugal) también evita detenerse en las cabinas de peaje y reduce los colapsos. Funciona a través de microondas y, aunque necesita pórticos en las carreteras, solo controla la entrada y la salida de una vía de peaje.
- ¿Quién pagará el receptor GPS? Posiblemente, el usuario. Podría ser que la concesionaria de la autopista asumiera parte de ese pago ya que se ahorraría una cantidad importante en personal, infraestructuras…
- Si permitimos que pongan un GPS en el coche ¿Quien te asegura que luego no pudiera registrar la velocidad? Desde luego, el tiempo en recorrer un tramo sería fácil de calcular… ¿Supondría eso una multa? ¿Y quién está dispuesto a “instalar” un policía de tráfico en su vehículo?
Fuentes: El Economista, Siemens