Un coche con el corazón de un tanque de hace medio siglo que además es extraordinariamente bello. Así es el Blastolene Indy Special.
El Blastolene Indy Special es uno de los vehículos por los que acabas buscando en Google dónde demonios puedes encontrar el motor de un tanque M47 Patton. El coche fue construido por el equipo de Blastolene, el mismo grupo de locos con talento que hace años construyó un coche turbo de carreras impulsado el motor de otro tanque para (como no) Jay Leno.
Con el Indy Special este grupo de manitas descerebrados quiso ir hacia una nueva dirección de diseño y evocar el espíritu de los corredores de las 500 millas de Indianápolis de la década de 1950 (aunque quizá el diseño del morro se haya visto un poco visto influenciado por los Ferrari de aquella época).
Pero, sin lugar a dudas, lo que más llama la atención del coche es su motor de doce cilindros en V que cubica, atención, 1.790 pulgadas cúbicas. No vamos a obligarte a buscar cuánto es. Son 29,3 litros cúbicos, una auténtica barbaridad, y se refrigera por el aire que le entra por el capó.
De este “anti-downsizing” han sacado nada menos que 910 CV de potencia que se trasnmiten a las ruedas traseras. Los chicos de Blastolene decidieron utilizar una transmisión Allison de 4 velocidades que procedía de un autobús Greyhound. Combinando esta transmisión con el motor (excepcionalmente largo) del M47, el resultado ha sido que el Indy Special mida, de la punta a la cola, 6,55 metros.
En ese tamaño había que cuidar la carrocería. Y lo han hecho. El cuerpo ha sido fabricado cuidadosamente a mano, en aluminio, una hazaña que deben de haber tardado meses en hacer. Los remates de los asientos de cueron son clásicos y sencillos, como exige un buen coche de carreras. Sobre el tablero y los relojes, también acabados en aluminio, está el volante de cuatro radios. Es tan austero como intimidatorio. Imagino que cogerlo, al tiempo que arrancas al motor, te debe hacer sentir capaz de todo. No tendrías miedo ni para dirigirte a apartar de su camino al iceberg que hundió al Titanic.
Si te gustaría saber más del equipo en Blastolene, no dejes de visitar su web. Pero antes, echa un ojo a las fotos de esta ma-ra-vi-lla.
Fuente: Blastolene